Este mes voy a hablar de "Buried", una película de Rodrigo Cortés que se estrenó el año pasado y que narra las desventuras de Paul Conroy, un pobre camionero que se despierta dentro de un ataúd enterrado en algún lugar de Irak.
La película no es ni mucho menos una obra maestra - la mayoría de las críticas dicen que lo es - pero me pareció bastante buena, por lo que me apetecía recomendarla.
El desdichado Conroy (interpretado por Ryan Reynolds) trabaja para una compañía norteamericana de transporte que opera en Irak; sus desventuras empiezan cuando se cruza con unos tipos que deciden darle lo suyo.
Personalmente me sorprendió. Pensaba que me encontraría ante la típica historia de psicópatas y lo que vi fue bastante distinto. Pero sobre todo me impactó - y es el principal motivo por el que la recomiendo - que se pudiera llenar toda la película - y manteniendo la tensión - sin salir del ataúd. Pensaba que lo resolverían con flash-backs como hicieron con Saw - jodiéndola, en mi opinión - pues, ¿cómo vas a rodar una película entera con un único personaje dentro de una caja? Pues se puede.
Es cierto que el protagonista no está solo, ya que cuenta con un teléfono que le permite comunicarse, pero la cámara no sale del ataúd en ningún momento. Aun así, hay que reconocer que la película tiene algunos defectos que la afean un poco - hay algún fallo argumental importante que no puedo revelar, pero supongo que si la véis os fijaréis -.
El protagonista sufre el síndrome de la "llamada idiota" - pienso dedicar una entrada a ese tema en cuanto tenga tiempo -. Si estás en una situación desesperada y tienes la inmensa suerte de contar con un teléfono, ¿qué mejor que ponerte histérico y gritar o insultar a cualquiera que te lo coja? Si quieres que te saquen de ahí no servirá de mucho, pero si deseas que te tomen por un pirado es la mejor opción. Creo que es uno de los fallos más corrientes de las películas de terror o thriller y me molesta bastante porque hace la historia menos creíble. "¿Policía? Por favor, tienen que venir, unos zombies intentan devorarme". Sí, cualquiera llamaría a comisaría para decir eso, seguro.
Por encima de la tensión y angustia que pueda generar Buried - no la veas si te agobian los espacios cerrados - creo que el objetivo del director era mandar un mensaje social, y esto la hace muy interesante. De hecho, fue lo que más me gustó de la película - aparte del puntazo del ataúd -. El protagonista cuenta con un móvil, como dijimos, y mantiene un par de conversaciones que te hacen pensar y reflexionar. Hay un diálogo en concreto que te deja con los pelos de punta y por el que merece la pena buena parte del argumento.
En cuanto al apartado de interpretación, lo cierto es que no quedé muy contento con Ryan Reynolds. No me parece mal actor, creo que lo hace bien, pero la situación de la película es tan sumamente extrema que tal vez hubiese sido necesario alguien con un nivel bastante más alto. Reynolds es el típico intérprete del que había oído hablar mil veces sin saber quién era. En todo caso no me ha parecido malo en esta primera ocasión.
Del resto de actores nada puedo decir porque, lamentablemente, no pude verla en versión original - y lo único que aparece de ellos en la película son sus voces -. Tampoco quiero juzgar muy duramente a Reynolds por eso - he visto sus gestos, pero no le he oído hablar -. El doblaje muy bueno, como siempre, pero supongo que os gustará más si la véis en inglés - la película es española, pero no se le encuentra la hispanidad por ninguna parte -.
Así pues una película no necesariamente magistral, no creo que marque vuestra vida, pero os recomiendo que la veáis si queréis pasar un buen rato sufriendo y reflexionando. Luego, si os apetece, podéis comentar por aquí qué os ha llamado la atención - a ver si nos han impactado los mismos diálogos y situaciones -. Espero que os guste. :)
La película no es ni mucho menos una obra maestra - la mayoría de las críticas dicen que lo es - pero me pareció bastante buena, por lo que me apetecía recomendarla.
El desdichado Conroy (interpretado por Ryan Reynolds) trabaja para una compañía norteamericana de transporte que opera en Irak; sus desventuras empiezan cuando se cruza con unos tipos que deciden darle lo suyo.
Personalmente me sorprendió. Pensaba que me encontraría ante la típica historia de psicópatas y lo que vi fue bastante distinto. Pero sobre todo me impactó - y es el principal motivo por el que la recomiendo - que se pudiera llenar toda la película - y manteniendo la tensión - sin salir del ataúd. Pensaba que lo resolverían con flash-backs como hicieron con Saw - jodiéndola, en mi opinión - pues, ¿cómo vas a rodar una película entera con un único personaje dentro de una caja? Pues se puede.
Es cierto que el protagonista no está solo, ya que cuenta con un teléfono que le permite comunicarse, pero la cámara no sale del ataúd en ningún momento. Aun así, hay que reconocer que la película tiene algunos defectos que la afean un poco - hay algún fallo argumental importante que no puedo revelar, pero supongo que si la véis os fijaréis -.
El protagonista sufre el síndrome de la "llamada idiota" - pienso dedicar una entrada a ese tema en cuanto tenga tiempo -. Si estás en una situación desesperada y tienes la inmensa suerte de contar con un teléfono, ¿qué mejor que ponerte histérico y gritar o insultar a cualquiera que te lo coja? Si quieres que te saquen de ahí no servirá de mucho, pero si deseas que te tomen por un pirado es la mejor opción. Creo que es uno de los fallos más corrientes de las películas de terror o thriller y me molesta bastante porque hace la historia menos creíble. "¿Policía? Por favor, tienen que venir, unos zombies intentan devorarme". Sí, cualquiera llamaría a comisaría para decir eso, seguro.
Por encima de la tensión y angustia que pueda generar Buried - no la veas si te agobian los espacios cerrados - creo que el objetivo del director era mandar un mensaje social, y esto la hace muy interesante. De hecho, fue lo que más me gustó de la película - aparte del puntazo del ataúd -. El protagonista cuenta con un móvil, como dijimos, y mantiene un par de conversaciones que te hacen pensar y reflexionar. Hay un diálogo en concreto que te deja con los pelos de punta y por el que merece la pena buena parte del argumento.
En cuanto al apartado de interpretación, lo cierto es que no quedé muy contento con Ryan Reynolds. No me parece mal actor, creo que lo hace bien, pero la situación de la película es tan sumamente extrema que tal vez hubiese sido necesario alguien con un nivel bastante más alto. Reynolds es el típico intérprete del que había oído hablar mil veces sin saber quién era. En todo caso no me ha parecido malo en esta primera ocasión.
Del resto de actores nada puedo decir porque, lamentablemente, no pude verla en versión original - y lo único que aparece de ellos en la película son sus voces -. Tampoco quiero juzgar muy duramente a Reynolds por eso - he visto sus gestos, pero no le he oído hablar -. El doblaje muy bueno, como siempre, pero supongo que os gustará más si la véis en inglés - la película es española, pero no se le encuentra la hispanidad por ninguna parte -.
Así pues una película no necesariamente magistral, no creo que marque vuestra vida, pero os recomiendo que la veáis si queréis pasar un buen rato sufriendo y reflexionando. Luego, si os apetece, podéis comentar por aquí qué os ha llamado la atención - a ver si nos han impactado los mismos diálogos y situaciones -. Espero que os guste. :)
Vi esta película en el cine el año pasado, y sí, como tú dices, me sorprendió, sobre todo por el mensaje que lleva, más allá del puro thriller.
ResponderEliminarClaro que no es una obra maestra, pero el guión es increíble teniendo en cuenta el espacio reducido en el que se desarrolla la trama...
SPOILER:
Personalmente lo que más me gustó es que no tiene un final "a la americana" (es decir, que no vienen los soldados corriendo a salvar al protagonista al final de la peli para así demostrar lo buenos que son todos en las fuerzas armadas). Y también ese momento en el que la empresa para la que trabajaba (que ya lo ha dado por muerto incluso antes de que pueda hacer la llamada) le hace "firmar" un contrato en el cual se exlcuye dicha corporación de toda culpa. Simplemente, cruel.
Pero es una película interesante de ver.
A mí el final también fue de lo que más me gustó, precisamente por eso que dices.
ResponderEliminarSPOILER:
De hecho, tal como comentas, en un primer momento también creía que iba a terminar con el 7º de Caballería acudiendo al rescate en el último minuto. Lo resolvió de forma muy efectista y bastante resultona.
En cuanto a la conversación con sus jefes que comentas, no sé si descubriste el fallo de guión - a eso me refería en el artículo -; parece ser que nadie puede detectar su posición ni saber desde qué número llama ni dónde está, pero de repente los jefazos de su empresa le llaman sin ningún problema. ¿Cómo es posible, si ni la CIA logra encontrarle, que ellos sí lo hagan? Esto lo hace un poco menos creíble, pero en todo caso me gustó la representación de la crueldad y falta de humanidad de las grandes corporaciones - que desde luego son peores incluso que como las pintan en la película -.
Destripamientos (tanto spoiler ni tanto spoiler XD):
ResponderEliminarYo cuando la vi no me di cuenta de ese fallo de guión que comentas...
La verdad es que a mí la película me gustó... Sobre todo porque me parece más realista que lo que es habitual en este tipo de películas.
Eso sí, me encantó el detalle del final, cuando se descubre que al otro, al que supuestamente habían rescatado, está tan muerto como iba a estar el protagonista en un rato... Besos!!!
A mí me gustó también bastante, es muy angustiosa y te mantiene en tensión todo el tiempo. La recomiendo, aunque no sea una obra maestra está muy bien.
ResponderEliminar