17.11.11

Coches

Están sentados en un banco, frente a la carretera. Fuman tabaco. Poco. Pero en esos tiempos acabar una cajetilla parecía una tarea imposible. Son dos - y deberían estar en clase -.

Después de pasar un rato hablando de tonterías se quedan en silencio. Uno de ellos se pone a mirar la calzada, los coches. Dicen que la carretera termina en Cataluña; la otra punta del mundo.

¿Cuántos de estos coches irán allá o vendrán de lugares lejanos? Se ponen a pensar en el momento en que también se suban a alguno de ellos, como lanzarse a un barco en movimiento para seguir el curso de las aguas. ¿En qué parada del camino volverán a tierra firme? ¿Qué ciudades sorprendentes atraviesa la gran vía?

Al cabo de un rato apagan el último cigarrillo y deciden volver a clase. Cuando llegan al instituto ya olvidaron sus pensamientos; en el fondo saben que, de todas formas, nunca tomarán la carretera.

10 comentarios:

  1. Yo, personalmente, prefiero ir andando.

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  2. Esos momentos de grandes pensamientos, de grandes ilusiones, de grandes proyectos nuevos, donde las ganas siempre estan renovadas... se van igual de rapido a como llegan. (u.u')

    Sin embargo... quizás algún día lo hagamos en serio.

    Saludos!

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  3. Hay que mantener viva la esperanza... Quién sabe si algún día...
    Vivamos los sueños

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  4. Cualquier excusa es buena para saltarse una clase y fumarse un cigarrillo. Cualquier excusa es buena para tomar la carretera, aunque sea en autobús.

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  5. Me gusta.
    Me siento identificado; aunque no fume.

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  6. me gustaría que fumaran más

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  7. nunca digas nunca! besos

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  8. Hasta que un día empiecen a caminar, quizás sin ni siquiera darse cuenta...

    Muy bueno ;-D Besos!!

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    Respuestas
    1. Lo dudo... sería una salida no realista propia de otro tipo de relatos.

      ¡Besos!

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