6.10.10

Luces

A veces, cuando estoy en la carretera, en medio de la oscuridad, veo luces. Luces a lo lejos. A un momento me parece que me deslumbra un coche por detrás. Luego quizá sea una farola que hay junto a la calzada. Y luego otra vez negrura pura, que se me echa encima, que me come, que se traga el coche.

A ratos las luces se acercan, y al final son otros viajeros que circulan por el carril contrario, o me adelantan, o los adelanto.

Otras veces recorro kilómetros, kilómetros y kilómetros sin cruzarme con nada, salvo esas luces irritantes que destellan en el horizonte, a mi espalda, en los espejos, sobre el capó, en todas partes. ¿Estrellas, vehículos, focos, antenas, aviones? Yo qué sé.

La sensación es muy extraña. A ratos tengo miedo porque veo las luces. ¿Y si es un loco de la carretera? ¿Y si es un psicópata que está conduciendo por ahí buscando carne fresca para destripar? ¿Y si son bandidos que me asaltan y me roban el coche, y me dejan tirado, o me matan?

La locura... Porque a otro rato tengo miedo porque las luces no están. ¿Y si estoy solo? ¿Solo? ¿Completamente solo en esta inmensa oscuridad? ¿En las hectáreas y hectáreas de carretera entre el siguiente pueblo y yo bajo el cielo? ¡No lo estarás diciendo en serio!

Luego estoy tranquilo, aunque no llego a relajarme, respiro al menos. Estoy solo. No hay nadie, nada. Sólo la noche, el albor y el horizonte rojizo. Soledad... impresiona, pero, ¿qué seguridad más grande que la de saberse solo en cientos de millas a la redonda? Si no hay nadie, nadie puede hacerme daño...

...y de repente, el futuro, seguro que en un rato aparecen las luces. ¡Ahí están! ¿Qué son, qué son? Maldita sea, no lo sé, pero seguro que nada bueno. Están detrás de mí, ahora delante... seguro que tarde o temprano nos cruzamos. Seguro que es un loco que me saca de la carretera. ¿Quién en su sano juicio conduce por ahí a las cuatro de la mañana un día como hoy?

Malditas luces... Sigo pensando en ellas, cuando aparco y quito las llaves. Y todavía no sé qué me da más miedo. ¿No verlas o que estén ahí?

Qué me da más miedo. ¿Haberlas perdido o irlas a encontrar? Indecisas luces...

4 comentarios:

  1. Una reflexión para ser leída varias veces. Una metáfora muy interesante.

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  2. Muchas gracias. La verdad quise expresar un par de cosas, aunque siempre me queda la duda de si es demasiado críptico.

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  3. interesante deveras, ¿ignorarlas, fingir que nunca existieron? mmmm

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  4. Mira, esa pregunta no me la planteé...

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Háblame.